Hace un par de semanas mi marido y yo acudíamos a Timesburg, una hamurguesería cuya andadura comenzó hace 5 años en Barcelona, y que hoy en día cuenta con 8 restaurantes. Afortunadamente uno de ellos está en Madrid, y allí es donde nos acercamos para probar sus hamburguesas gourmet y sus crujientísimas patatas (excusa más que perfecta para volver).
Uno de los sellos de sus hamburguesas es sin duda su pan, que ha convertido a Timesbrug en todo un referente entre los amantes de las hamburguesas. Todas ellas están elaboradas con carnes cuidadosamente seleccionadas preparadas a la parrilla y al punto.
Mención a parte se merecen sus patatas (las mejores que he probado en mi vida) con receta casera de la abuela Maria Antonia, cortadas a mano y fritas en aceite de oliva. Cada bocado era como transportarse al mismísimo cielo y es que iría de nuevo sólo por volver a comer esas patatas. Es escribir estas líneas y se me hace la boca agua...literal. Y lo mejor de todo es que las puedes mojar en una amplia selección de salsas caseras.
Primero es necesario escoger el tipo de pan. El mítico de semillas de amapola o bien mollete, multicereal o incluso burger sin pan. En cuanto a las carnes puedes escoger la ecológica, de wagyu, doble carne de 400 gramos y la nueva vegetariana. Un crimen para mi gusto y es que la carne es absolutamente deliciosa.
Para mi marido la Rodeo, con 200 gramos de carne 100 % vacuno, bacon, doble cheddar, cebolla, cebolla crujiente, tomate, lechuga francesa, salsa BBQ y mayonesa timesburg. Las dos increíblemente deliciosas aunque para mi gusto mejor la de foie. La carne increíblemente rica y al punto. Una de las mejores de Madrid.
Para acompañar una deliciosa ración de patatas (3,20 euros) que fue nuestro error más sonado y es que teníamos que haber pedido la ración de medio kilo (5,80 euros) por aquello de que las patatas eran un sueño hecho realidad. Creo que aún sigo soñando con ellas...De hecho si mirabas el resto de mesas, todos disfrutaban de los cuencos de medio kilo y es que se comen como las pipas.
Mi único pero a tan ensoñadora comida fue el postre. Apostamos por los únicos que había: tiramisú y panna cotta de nutella, que no hacen justicia a las deliciosas hamburguesas. Nos hubiera gustado probar la tarta de zanahoria, sólo disponible en los restaurantes de Barcelona. Tal vez echamos de menos una cheesecake, por aquello de que tiende a ser un postre muy socorrido en las hamburgueserías. Yo hubiera eliminado el postre de la ecuación y me hubiera deleitado por ese medio kilo de patatas.
En cuanto al precio más que correcto por la increíble calidad de las hamburguesas y por la excelente atención por parte de los camareros. Sin duda repetiré...Sin duda Timesburg se ha colado en mi TOP 3 de hamburguesas de Madrid...
Fotografías de The Hot Mess Corner.
4 comments:
Se me hace la boca agua, jejejeje...
Besitos
No soy mucho de carne pero después de leerte sí me apetecía comerme una hamburguesa con unas patatas.
Tengo que ir para probar las hamburguesas pero sobre todo las patatas!jajaja. Bsts
Thanks a lot for sharing.
Publicar un comentario
Anímate y déjanos un comentario. Las chicas de The Hot Mess Corner te lo agradecemos.